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==. Llegó el día 10 de Junio de 1809 y con salvas de artillería era proclamada la anexión de los Esta- dos del Papa y de la misma Roma al imperio del gran Corso (1). Pío VII publicó a su vez una Bula de excomu- nión contra los invasores: (Quum memoranda), que por el momento haría repetir a Napoleón, que aque- lla excomunión no sería bastante para hacer caer de las manos de sus soldados las armas vencedoras; pero luego tuvo su efecto fulminante cuando las huestes napoleónicas retrocedían de Rusia aniquila- das y vencidas... por el frío más que por las armas. Napoleón, irritado por la excomunión y la ente- reza del venerable anciano, dió orden a Miollis y a Murat para que se llevaran al Papa fuera de Roma; fué ocupado el castillo de Sant Angelo, en donde se había refugiado el Pontífice, y hecho éste prisionero, fué conducido a Grenoble primero y luego a Savona (2), en donde tuvo lugar la violenta entrevista entre Napoleón y Pío Vil, en la que se- gún reza la tradición el emperador llegó a poner sus manos en el rostro del Papa. Con tales insultos y vejaciones al Papa las iras jacobinas se desbor- daron contra el clero y contra los religiosos. Se pu- sieron a pública subasta ornamentos y Vasos sagra- (1), La usurpación napoleónica fué firmada el 17 de Mayo en Viena, pero se publicó en Roma el 10 de Junio. En el Decreto de anexión se le conservaba al Papa la facultad de residir en Roma y se le asignaba una renta de 2.000.000 de francos. Fué el consummatum est de rapiñas ante- riores. (2) Julio y Agosto 1809.