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— 29= mí». ¿Cuál virtud de Jesucrito? la humildad y la complacencia en el desprecio; y añade: «Un alma grande, muy favorecida de Dios, me hace decir por su director espiritual se informe al Padre Santo, que si no empieza la reforma, nuevas calamidades vendrán sobre nosotros. Yo tengo algunas hojas ya extendidas para esta reforma. Yo deseo sólo el ver- dadero bien de las almas y gimo ante Dios al ver la mísera situación de nuestros tiempos». ¿Cómo no enamorarse de un hombre que con esta lealtad habla y obra el bien del pueblo? Sin embargo llegó el mes de Julio del propio año 1825 y en él pudo cosechar abundosa copia de amarguras. El misionero canónigo Betti, publicó un libro con el título: /1 Director dirigido, y suplicó poderlo dedicar al Papa. León XII no desdeñó el aceptar la dedicatoria, pero al ver en el frontispicio del libro la Congregación de la Preciosa Sangre, le borró con su augusta mano, y escribió: Congrega- ción del SS. Salvador. Con este solo acto concedía una gran victoria a los enemigos de Gaspar y de su Obra. Al recibir noticia tan desagradable, viendo comprometida no solo su persona, que esto era lo de menos, sino también la existencia de la Congre- gación, pensó hablar como su conciencia le dicta- ba, y en 8 de Julio decía a Mons. Cristaldi: «El señor canónigo Betti me ha comunicado una carta suya. Doy gracias a Dios que no he salido de casa para trabajos de ministerio, porque de otro modo «estas noticias hubieran producido en mi humanidad