BCCPAM000R09-1-22000000000000

— 103— establecieran los Misioneros mejor que en San Félix. Dada esta oposición suspendió Gonnelli toda gestión y tornó a Roma. Aunque al frente de aquella idea de los Misio- neros venía el Dr. Bonanni, era ya conocido casi como alma de la obra el Beato Gaspar, y su juven- tud daba en verdad pretexto a hablillas y murmura- ciones, porque falto de experiencia y sin medios trataba en empresa tan arriesgada, como decían. El Beato apenas hacía mérito alguno de este reparo. .Convencido de la 1 oluntad de Dios, cada día se afirmaba más en sus resoluciones, y a últimos del año inauguró su nueva carrera de misionero predicando en Roma una solemne misión durante la Novena de Nochebuena preparada por la Archi- cofradía de la Preciosa Sangre. Tuvo lugar en la iglesia de San Nicolás in Cárcere y claro se vió que el enemigo de las almas trataba de estorbar sus éxitos causando un fuerte incendio en la iglesia du- rante las funciones. Con este motivo sobrellevó Gaspar serios disgustos de parte de la autoridad eclesiástica. kkok Y así llegamos al año 1815, año de gratísimos recuerdos y de indecibles motivos de alegría para nuestro Beato, por haber tenido durante él la fun- dación de su Congregación de la Preciosa Sangre. Las peripecias y episodios que ocurrieron entre di- ficultades y reparos puede leerlos el lector, escritos de mano de Santelli.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz