BCCPAM000R09-1-03000000000000

FLOR DE AZUCENA 121 resita es una gran verdad: Yo tengo mi lema: Juan, XV-9). “Permaneced en mi amor” (5. “Esta es mi pequeña misión”. Jesús, jefe su- premo del apostolado encuentra, cuando quiere, almas abnegadas que se sacrifiquen en las obras exteriores, y es el mismo que llama como quiere a otras almas a las obras interiores .. Margarita solía decirme que ella miraba las almas desde el Sagrario... Buen punto de vista es. Excelente observatorio y también “laborato- rio” maravilloso de las conversiones. Algún día se verá a qué eficacia se han debido las recientes resonantísimas conversiones... Es este uno de los aspectos más divinos de la infancia espiritual de las almas. Aparacen inca- paces para cosas sonadas y de bulto; viven des- conocidas sin que nadie se fije en su acción... y no obstante se mantienen en una infancia hercúlea. Pero notemos la humildad de nuestra Mar- garita: como los niños que todavía no se dan cuenta de la casa a que pertenecen ni de la so- ciedad en que viven, tampoco parecía darse cuen ta ella ni de los títulos de su casa ni de la clase a que pertenecía. Ya se ha dicho que jamás to- leró el uso de sombrero ni de seda. Le bastaba un sencillo toillette con mantilla y un traje pare- cido a un hábito, por humilde. Nos avergonzaríamos de recordar siquiera, a cuento de Margarita, la vanidosa ostentación de

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz