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==» De estos peregrinos el más interesante y en verdad decisivo es Nicolás de Pogibonsi que estuvo en Tierra Santa en el 1335 y dejó escritas las palabras siguientes: * Dentro (de la ciudad de Nazaret) existió una bellísima Iglesia en el mismo sitio donde estaba la Casa de nuestra Señora cuando recibió la Anunciación del Arcángel : pero ahora está derruida la Iglesia, excepto la habitación de la Virgen. Esta habitación es pequeñísima y trabajada en mo- sáico ; la Casa estaba apoyada a una cueva en la roca. , Cuando el peregrino nombra por primera vez la casa de nuestra Señora, se refiere a la casa entera, en cuyo honor se costruyó la Basílica; pero cuando la menciona la segunda vez y dice que era pequeñísima, se refiere a la cueva o gruta que allí quedó. En cuanto a la Casa propiamente dicha, cuando existía (viene a decir) estaba apoyada a una cuava en la roca. La palabra estaba da a entender una cosa que ye no existía, puesto que en todo lo demás usa el presente. Así mismo es muy significativo el hecho que lo toma- mos de una Bula de Clemente V, de la que vamos a ocuparnos: De esta Bula que lleva la fecha del 18 de Julio de 1310, resulta que el caballero tedesco Carlos Luis de Schevenden con su esposa Dña. Catalina Irmina de Lan- dfschaden emprendieron el viaje a Tierra Santa, y pasaron por Loreto, donde " ante la milagrosa Virgen María Lau- retana ¡ hicieron un voto de cierta donación a los Car- melitas de su pueblo. Si estos dos peregrinos fueron a Loreto ántes del viaje a Palestina, lo cual es poco probable, hay que ad- mitir que en aquel tiempo había llegado a Alemania la noticia de la milagrosa traslación de la Sta. Casa; pero si a Loreto fueron a su regreso del viaje a Palestina, debería- mos deducir que, habiendo sabido en Nazaret la traslación de la Sta. Casa, quisieron venir a venerarla en Loreto. Tanto una como otra hipótesis resulta en alto grado favo- rable a la Traslación.

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