BCCPAM000R08-5-41000000000000

=D cipalmente de las naciones latinas, con su cortejo inseparable de motines, revoluciones, blasfemias, atentados personales ó colectivos y perturbación general de todos los organis- mos políticos y sociales, no puede explicarse sino acudiendo á esa idea generadora de to- da clase de tempestades, la idea liberal. Y el razonamiento empleado para encon- trar la clave de esa situación anormal de los pueblos de Europa, puede aplicarse con en- tera exactitud á las naciones de América, su- midas habitualmente en guerras religiosas más que políticas, que entorpecen su desen- volvimiento nacional, merced á esa idea im- prudentemente arrojada sobre la misma cuna de aquellos brillantes pueblos. Aquí tiene V., pues, en breves párrafos, no tedos, pero sí los principales crímenes del Liberalismo. Esa es su historia de sangre. El Liberalismo autorizando la persecución de la Religión Católica y persiguiéndola él mismo, ha debilitado la sociedad, ha relajado los vín- culos de la familia y ha corrompido al indi- viduo. El Liberalismo ha profanado, robado, asesinado, calumniado y pervertido. Se ha burlado de Dios, usurpando el trono de su soberanía sobre los pueblos, de la ley, ense- ñando á las naciones á violarla, y creande escuelas donde se enseña como lícita esa

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz