BCCPAM000R08-3-44000000000000

28 El l.º de Septiembre celebré la :Misa de Requiem,. Durante la misma pusieron en la tumba huevos, ají, .gallina guisada, agua bendita, yuca, plátano, agí com– puesto, nañe y caña de azúcar con varias otras cosas, á todo lo cual llaman ccvnu1,1•ico, y en otros países ofrenda. El día 2 bendije algunos matrimonios. Los novios· tienen la costumbre después de casarse de ir arrodi– llándose delante de sus mayores, de quienes reciben 1mo por uno la bendición. ~ Por la tarde fuí á cantar responsos al antiguo cemen– terio, y sin que yo pidiese nada me dieron doce galli– nas. Por la noche tuvimos Vísperas solemnes, que con– sistieron en el rezo del Rosario y ca.nto del A ·ve ma1·is 8tella, el .JJ1agnijicat, y algunos versitos á la Divina Pastora: entre tanto los fiesteros disparaban tiros de escopeta para dar,¡más realce á la solemnidad. Al otro día, acbmpañado de casi tQdo el pueblo, me dirigí al puerto é hice la bendición solemne de la canoa, llamándola Pastora .Ma1·ía. Esta ceremoni~ agradó muchísimo á los indios, quienes me buscaban después para que les bendijera sus casas y campos. El mismo día 3 hubo Misa cantada con acompaña.– miento de bombo y violín ·tocado por el P. Collins. El coro estuvo á ,cargo del señor alcalde de l.\focoa, que llegó el día anterior con el fin de atender á los misio– neros y hacernos compañía hasta nuestra salida. A las once y media nos embarcamos en nuestra Pasto– ra, viniendo á despedirse los indios é indias de Limón. Llegamos á Pacayaco á las dos y media, habiendo tenido buena navegación. Nos hospedamos en un rau– chito y conservamos el fuego toda la noche por temor á los tigres. Los indios pacayacos son de la tribu Mocoa, y se de– dican á lavar oro, que se encuentra en abundaucia. en las orillas del Caquetá.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz