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18 Los Jueves Eucarísticos ralmente por egoismo... La tacañería , de las criaturas no puede entrar en compa- ración con la generosidad de Jesús. El mayor milagro de Dios es el haberse dado tan por entero á nosotros «Memo- riam fecit mirabilium suorum. ¿Qué podíamos dar nosotros á otro? ¿La vida? Esto ya eralo sumo. Nadie tie- ne mayor caridad que el que da la vida por el amigo ¿Qué nos ha dado Jesucristo? To- do, todo y cada día nos da su vida nueva- mente y con generosidad más entusiasta, La vida de Jesucristo es vida divina... Guzmán el Bueno ofrecía por la patria la vida de su hijo arrojando de los mu- ros la daga con que debía ser muerto. Jesucristo ofreció en la cruz su vida y ofrece de nuevo en los altares su cuerpo con alma, vida, humanidad y divinidad. La grandeza de Jesucristo se conoce en la grandeza del don que nos comuni- Con esta donación quiso obligar al mundo á inclinarse ante Él con actitud amante. La Eucaristía, repitámoslo, es el mayor milagro de su corazón. Preguntaba á Lafayette un amigo su- yo ¿qué había hecho durante el imperio de Napoleón? Qué hacía? Estaba en pié.

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