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6 La Eucaristía es mi vida. que hay manía de asociaciones, siendo así que se necesitan y se buscan como remedio á los males ó como complemen- to de una devoción. Nada prueba contra su utilidad y necesidad el que no acierten en todo y produzcan menor fruto del que era de esperar. Mientras sean cosas humanas no podrán desprenderse de al- gunas miserias. Yo desearía que se reconociese en las nuevas asociaciones católicas la moder- na fase de la estrategia del bien contra el mal. Sobre todo, que los buenos no pongan obstáculos al desarrollo de estas nuevas formas de devoción eucarística ya apro- badas por la Iglesia que son brote del arbol frondoso de la piedad cristiana... La hermosura del arbol está en la frondosa variedad de sus ramas y en el fruto que reportan. Necedad sería repro- bar estas nuevas obras sacramentales por que no florecen como debían las antiguas. Las cosas humanas tienen ese flaco lado, que se estimulan con la nove- dad. Sobre todo mírese y remirese el ob- jeto y el fin de los JUEVES EUCARÍSTICOS.