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Sección 1.” 161 Todavía se crearon en Madrid nuevo, dos públicos oratorios con sus corres- pondientes congregaciones, cuyos indi- viduos se titularon Indignos Esclavos del Santísimo Sacramento. Como unos judíos de Bruselas diesen de puñaladas á tres santas formas, (que se conservan incorruptas con las señales del ultraje sufrido,) comenzose á celebrar en la Iglesia de Corpus Christi todos los Jueves la misa que llamaban Del Mila- gro, en desagravio de aquel desacato. Añadamos para cerrar este apunte el Jubileo circular de las Cuarenta Horas, llamada Laus perennis, que desde el si- glo XVII viene celebrándose en la corte española con gran concurrencia. Carlos Borromeo lo habia formulado en Milán; Clemente VII lo estableció en Roma y se inauguró con gran éxito en Madrid. Es, pues, la española, de verdad, una corte eucarística, en agradecimiento á los favores recibidos del Dios de los al- tares y como expresión de la fé que ha profesado siempre sin alteraciones ni desmayos. Los nombres más gloriosos de nues- Vida de amor.—12.

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