BCCPAM000R02b-6-2300000000000

EPS 23 CHAS q Yo la ARO PRD, + | z e Y iz Te O CAN: CAPÍTULO XII. Pereza y lemor. ¡Los perezosos! Es incomprensible la palabra pereza, tratándose de la Eucaris- tía. Jesús nunca tiene pereza de venir á nosotros. Jesús nunca se cansa de co- municarse con nosotros..... Jesús nunca se'excusa de oirnos y de acompañarnos. ¿Pero, nosotros? Es preciso añadir aquí un capítulo consagrado á los pere- ZOSOS..... que nunca tienen tiempo ó siempre tienen inconvenientes para co- mulgar y llegarse á Jesús. No confundáis la devoción con el ca- pricho. Llegais á la Iglesia, cuando se os antoja y os viene en talante, y no cuando lo quiere y os llama Dios. La devoción, dice el Angélico, es la prontitud de ánimo, para hacer aquello que es del agrado de Dios.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz