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fueron la Eu-caristía concelebrada en la mañana del martes y la reunión de todos los miembros de la Frater– nidad para el diálogo final de Visita. El Padre Provincial nos dirigió una conferencia profundamente mentali– zadora sobre las exigencias de la vida religiosa como vida de Fraternidad en comunidad de fe, de vida, de carisma franciscano y de servicio, insistiendo sobre todo en la vida de oración per– sonal y comunitaria. Como resultados prácticos de la discusión subsiguiente se concretaron estos puntos: a) Todos los miembros de la Fra– ternidad -incluidos los de Premont– se reunirán cada dos meses para vivir un día entero en unión fraterna de oración y revisión de vida. b) En las reuniones mensuales, o más frecuentes, que tienen los herma– nos de Dallas y Fort W orth procura– rán celebrar la Eucaristía y decir al– guna Hora de la alabanza divina jun– tos. c) En cada pequeña división de la Fraternidad estudien qué acto de oración pueden tener comunitaria– mente los dos o tres religiosos que viven juntos. Hubo una peti'Ción de la Frater– nidad en relación con la ida de vaca– ciones a la Provincia: tomar vacacio– nes de dos meses cada tres años, con un mes adicional por cada año que se pospusiera voluntariamente, has– ta un máximum de cuatro meses. Se estudíaron las razones en pro Y en contra y quedó pendiente de solu– ción en -consulta con el Definitorio Provincial. (Lo que entonces quedó en suspenso se permitió más tarde, de una manera general para todos el año 1977: vacaciones en España por tres meses cada tres años). 5. Visita del P. Juan Miguel Mendia Procedente de Filipinas y Califor– nia,y acom.{)añado del Padre Secreta- rio Provincial Elías Cabodevilla, lle– gó a Dallas el 26 de febrero de 1977. La Visita se prolongó hasta el miér– coles, día 9 de marzo, en que ambos, Provincial y Secretario, viajaron a México. Como en las Visitas anterio– res el ado más importante fue el rea– lizado el último día, martes, día 8: oración y asamblea hasta las 12 del mediodía, y de dos y media a 6 de la tarde, finalizándose con la concele– bración de la Eucaristía. El tema fuerte que nos ocupó todo el día fue el de la. promoción de vo– caciones a la vida capuchina, siguien– do la idea del Padre General de que, incluso, se pensara en unas casas de forma-ción propias en Texas. (Véase amplia crónica de la Visita en OPI, n. 120, 24 de mayo de 1977, págs_ 3-7). 6. Visita del Padre Rufino Grández Tuvo lugar del 27 de marzo al 4 de abril de 1979. El Padre Provincial venía directamente de México, ha– biendo pasado antes por Ecuador, Co– lombia, Costa Rica y Guatemala, don– de había estado de Visita canónica en los lugares y con las personas de su jurisdicción o sembrando en todas partes su mensaje de amor francisca– no y de paz evangéli-ca con el mejor optimismo de su espíritu. En cumplimiento de su obligación como Superior Mayor visitó todas nuestras casas y habló particularmen– te con todos los religiosos. Como en la Visita anterior, el plato fuerte de ésta -nunca mejor empleada la expresión- fue la asam– blea de la Fraternidad tenida en nuestra casa de Lourdes el día tres de abril, martes, con un índice de problemas y cuestiones capaz de ago– tar la resistencia de un hombre con nervios y mús·culos de acero. La asamblea comenzó con el rezo de ter– cia a las diez, y se prolongó hasta bien entrada la tarde, con la natural interrupción para el ágape fraterno y el bien ganado descanso clásicamen– te capuchino para después de yantar. 19