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gastos. En la relación económh'.:a de la Fraternidad correspondiente al trienio 1969-1972 aparece una partida de $ 2,250.00 gastados con ese fin. En tres veranos consecutivos por los años 1963, 64 y 65 se llevaron va– rios niños de nuestras parroquias, h_asta un número de quince, a Victo– ria, Kansas, para un cursillo prevo– cacional organizado en el mismo se– minario capuchino. En dos distintas ocasiones, verano de 1975 y 1978, aprovechando las fa– cilidades que ofrece nuestro Centro de Cursillos en Dallas, se tuvieron dos cursillos prevocacionales, con asistencia de unos veinte jóvenes en cada uno, reclutados en nuestras pa– rroquias, y que parecían mostrar al– guna señal y esperanza vocacional. Si la semilla sembrada no ha gra– nado con la abundancia que hubié– r~~os querido, al menos la preocupa– c1on de la Fraternidad ha existido y ha dado ya dos frutos positivos: la vocación del joven Arturo Molina, hoy profeso capuchino de votos tem- 1_>orales, que, por nuestra iniciativa, ingresó en el iprograma vocacional de nuestros hermanos de México y actualmente hace los estudios ecle– siásti-cos en Costa Rica con la inten– ci_ón de integrarse en ~n futuro pró– ximo a nuestra Fraternidad; y el nombramiento del Padre Alfonso Casteig, con fecha 11 de octubre de 1977, como director vocacional. Para que pueda entregarse con más in– t~msidad y eficacia al programa voca– cional el Padre Alfonso quedó libe– rado el pasado mes de abril de su cargo de Director diocesano de Cur– sillos y de toda responsabilidad pa– rroquial. Esperamos que la incorporación de Arturo a la Fraternidad y el nombra– miento del Padre Alfonso serán el comienzo de una nueva era. Aunque no se nos ocultan las dificultades so– ciológicas y espirituales que p esan actualmente en casi toda la Iglesia sobre la tarea vo·cacional. VII VISITAS DE LOS SUPERIORES MAYORES A LA FRATERNIDAD Por dos veces en los 25 años he– mos tenido el privilegio de recibir en nuestra casa al Padre General de la Orden: la primera fue una visita muy breve del M. R. Padre Clemente de Milwaukee en junio de 1967, aprove– chando su estancia en Estados Uni– dos. La segunda, una visita paternal y alentadora del M. R. P . Paschalis Rywalski. Llegó acompañado del P. Aloysius Ward, Definidor General para la lengua inglesa. Estuvieron con nosotros los días 10 y 11 de ju– nio de 1975, prosiguiendo después su viaje a Broken Arrow, Oklahoma. Tuvimos la oportunidad de hablar con ellos de nuestra vida apostólica y franciscana; celebramos juntos la Eucaristía presidida por el P . Gene– ral, quien nos dirigió la homilía, y después tuvimos una •conversación en común, en la que el P . General nos animó a ser Fraternidad de oración y a trabajar en la extensión de la Or– den aquí en Texas. El P. Aloysius nos había hecho ya una visita de amistad los días 9 y 11 de febrero de 1973. Naturalmente que fueron de más impacto para nosotros las Visitas ca– nónicas de nuestros Superiores Pro– vinciales. l. Visita del Padre Florencio de Artabia Según el acta oficial de la Visita llegó a Dallas, procedente de New York, el día 17 de julio de 1961. En días sucesivos visitó todos los lugares encomendados a la Fraternidad, y habló con cada uno de los Religiosos, según es costumbre y ritual en estos casos. El mismo Padre Provincial ex tien- 17