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22 su corazén el amor del Hijo por un lado, y por otro porque con- forme pasaban los dias, ibase acer- -cando mas y mas el tiempo de la consumacién del sacrificio. Viendo ~ & la Virgen Santisima sufrir un © dolor tan terrible y tan continua- do, animémonos nosotros 4 llevar con paciencia los trabajos y tribu- laciones que Dios nos manda en esta vida. | Meditese sobre lo leido ete, ORACION PARA ESTE DIA iTristisima Virgen Maria, Madre mia! Una espada de dolor, que ha- bia de atravesar vuestra alma, os profetiz6 el santo Simeén; pero yo he afladido 4 vuestro corazén tan- tas espadas agudisimas, cuantos son los pecados, que he cometido. No sobre Vos, que sois inocente, sino sobre mi, que soy reo de tantos y tan enormes delitos, deben recaer