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¿— UA var a cabo lo que hemos dicho. No. Es la Aso» ciación la que ejerce ese apostolado eucariístico; pero todos los socios contribuyen a la Obra con alistarse en los coros duodenarios, porque coad- yuvan a la existencia de la Asociación, y dentro de esta, por ser una red inmensa, hay siempre elementos para todas las manifestaciones de la vida sacramental, que hemos indicado. Siempre hay en ella personas dispuestas a llevar a efecto este apostolado eucarístico. No hablamos a humo de paja. Las noticias y crónicas están razonando con hechos esta afirmación. No se olvide, pues, que los Jueves tienen la misión de levantar, en to- das partes, el sentimiento eucaristico, prestando su concurso y apoyo a toda otra asociación simi- lar. Los Jueves se instauran a ser posible, en to- dos los Sagrarios y todos los Sagrarios pertenecen a su esfera de acción. Por eso en las hermosas «Horas Santas» que celebra, a donde, como se ha dicho, concurren en masa los coros, se guarda un orden conveniente o turno, y van alternando por etapas, y recorren las iglesias que soliciten su celebración. Dicho se está, que estas grandes explosiones de vida eucarística tienen lugar solo en las grandes poblaciones; pero no empece eso para que en poblaciones de una o dos iglesias, puedan también ejercerse dichos entusiasmos. Quien no haya conocido la actua- ción de la obra, tal vez no podrá hacerse cargo de lo que nosotros no acertamos a exponer. También es cierto que no todas las capitales se prestan al desenvolvimiento de toda la fuerza expansiva que entraña la Asociación. Empero, la Asociación se acomoda, por flexibilidad de su re-