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Y — acuden coros de otros puntos a llenar el vacio y suplir las deficiencias originadas, tanto de la po- breza de la fe como de la pobreza de medios. El caso es que Jesús esté convenientemente asistido y acompañado en sus manifestaciones de amor. Antes de cerrar este parrafito copiemos un suelto de «El Noticiero Granadino»: «Los Jue- ves eucarísticos de Nuestra Señora del Tránsito inauguraron ayer (19 de Agosto) el coro de «invá- lidas», cuyo objeto es llevar la comunión a los po- brecitos enfermos o paralíticos que no pueden asis- tir a la iglesia a conmemorar la Institución del Gran Sacramento del amor». ¡Muy hermoso! Vil. —«NADA DE NOVEDADES» ORIGEN DIVINO A fe que hay hartas bellezas en esta Asocia- ción, que más que una reynión y acumulación de devotos, representa un apostolado glorioso en con- sonancia con lo que supone la comunión «conme- morativa». Los discípulos de J. C. salieron del Cenáculo inflamados, entusiastas, sin miedo, ni cobardias, una vez que se realizó el sacrificio de la Cruz. Aquellos primeros asomos de flaqueza, de flaqueza «misteriosa», que tuvieron durante la Pasión, tro- cáronse en vivísimo amor y ardentísimo apostola- do, una vez que el Divino Maestro subió a los cie- los. El espiritu de fervor que en el Cenáculo re- cibieron en el día de Pentecostés, llameaba al re- cuerdo del adorable misterio instituido en aquel mismo lugar en la noche del Jueves Santo. «Hoc