BCCPAM000R00-3-08p25d00000000

A altar, hacer la vela, acompañar al Santísimo, or- ganizar procesiones eucaristicas? Donde existe la Obra de los Jueves, los respectivos Coros. No puede dudarse que las asociaciones similares po- drán hacer lo propio; pero palmariamente se ve, que el fervor y el entusiasmo es más tangible en las almas asociadas a los Jueves; porque llevan el sello del apostolado eucaristico, y por deber y voca- ción suplen los coros duodenarios toda falta de adoradores o de organizadores en las fiestas refe- rentes al Santísimo. Como decia el eminente orador y canónigo de Zaragoza, don Juan Buj: «Esta Obra de los Jue- ves no viene a matar nada, pero viene a dar vida a todo». Asociaciones que llevaban vida lánguida y pordiosera temieron morir al aparecer en su pa- rroquia o localidad la Obra de los Jueves. Algu- mos párrocos, desconociendo la actuación de la Ins- titución de que hablamos, protestaron de que, siendo pobres, la virtualidad y el entusiasmo de las viejas. asociaciones, perecerían con el adveni- miento de la nueva. Error triste de que pronto salieron, al ver de qué modo recibian nueva y más vigorosa inyección las antiguas cofradías sacramen- tales. Es un honor para los «juevistas» trabajar en levantar el espíritu de otras asociaciones agóni- cas; precisamente entra de lleno en su plan de apostolado eucaristico, el fomentar y dar calor a todo lo que sepa a Sacramento. Como la red de los Jueves es tan extensa, cuando en una parro- quia no existen medios para tributar el culto debido al Santísimo, ya en las velas durante la exposición, ya también en las procesiones, con una nota en- viada a la Dirección se allana todo; porque luego

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz