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JULIO de las misiones, solicitó ir a la de la Guajira para dedicarse a la salvación de las almas. Allí trabajó como buen misionero, empleándose en el cumplimiento de cuanto se le mandaba. En cierta ocasión hubo necesidad de resolver un asunto de la Misión de Caracas, y se le designó a él para este im- portante negocio ; y a pesar de que la fiebre amarilla estaba haciendo estragos en aquella población, no por esto de- mostró la menor repugnancia en cumplir el mandato de los Superiores. Llegó, en efecto, a Caracas, y como si la fiebre le hu- biera estado esperando para hacer en él presa, cayó grave- mente enfermo. Santamente resignado en la voluntad de Dios, y fortalecido con los Sacramentos, murió el 19 de julio de 1900. Apéndice núm. ...... Animae fratrum nostrorum defunctorum, quorum hodie memoriam facimus, per misericordiam Dei requiescant in pace. Pie Jesu Domine, dona eis requiem sempiternam. Día 20 MURCIA: Convento de San Antonio. 1.794. P. Matías de Valencia. j 1648. De 44 años de edad y 10 de religión. CASTELLON: Convento de San José y San Ponce. 1.795. Fr. Jerónimo de Castellón, lego. y 1698. De 85 años de edad y 62 de vida religiosa. MARACAIBO (Venezuela). 1.796. P. Justo de Valencia. Religioso de esclarecidas virtudes y dotado de extraordinario celo apostólico, que desplegó no sólo en la Provincia, sino, sobre todo, en nuestra Misión de Santa Marta y después en toda la península guajira. Más tarde fué trasladado a Maracaibo, en donde fundó, con breve Pontificio, la Congregación del Diario de la Inmacu- lada Concepción, con facultad de eregir nuevas congrega- ciones y agregarlas a la de Maracaibo. En las estribaciones de la sierra de Perijá habían establecido los capuchinos va- lencianos cinco pueblos, de los que el P. Justo fué nombrado Visitador y fijó su residencia en Belén, uno de estos cinco.