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JHS IX “Niciado; y por eso cuando no hallan señal de haber sido el novicio despedido ó de haber profesado, ¡cuidan de poner al pie del nombre: «no dice si profesó». Desde el 8 de Diciembre de 1658 añádese la edad del novicio, y, á partir del año 1695, dase cuenta del tiempo y lugar en que, unos pocos, mu- rieron. 2, Habremos de asignar el segundo lugar al infolio, de quinientas treinta y cinco páginas, titula- do, «/Erario de la S. Religión de los Frailes Menores Capuchinos» y dividido en cinco partes, que scn: Ke Fundaciones (1609-1698) 11.4 Sucesos dignos de memoria (1609-1659). 111.4 Capítulos Provincia- les (1614-1835) IV. % Vidas (1609-1659) y V.2 Necrología (1619-1648). Este enorme volúmen, que no está del todo exento de los resabios de la época y ha dado en llamarse Crónica, con menosprecio del título, impuesto por el sucesor en el cargo de Cronista del R. P. Felix de Granada, el R, P. Fr. Juan de Monzón, á quien se debe no solo la idea, división y redacción sino la transcripción, casi literal, de las Primeras fundaciones del citado P. Felix ha sido el arsenal primero donde hemos acudido en busca de materiales. Es harto lamentable que sólo la parte tercera esté completa, y que, muerto el P. Monzón, nadie haya intentado continuar y perfeccionar las partes restantes. 3.2 Sigue por su importancia y utilidad el Viridario auténtico, que, si no me engaño, es fuerza atri- buirlo á las iniciativas del M R. P. Provincial, Fr. Manuel de Madrid, 6 á las de su digno y sapientísimo Secretario, P. Antonio de Fuentelapeña; principió en 6 de Junio de 1666 y concluye en el año 1816. Además de la sagrada ordenación de casi todos los Coristas, hemos extraido de este libro muchos nombres y datos necrológicos. Es un libro de oficina; el libro en el cual iban estampando, autorizadas muchas veces con la firma del Secretario, las cosas importantes acaecidas en cada trienio. ¡Lástima es que nos lo hayan legado sin cuidar de suplir lo acaecido desde el año 1669 exclusive hasta el de 1673, y desde 1677 hasta el año 1684; y que, con el pretexto quizá de que no se escandalizasen los seglares y los religiosos pusilámines, hayan arrancado las hojas últimas, 1816-35, que indudablemente arroja- rían vivísima luz sobre los acontecimientos del periodo constitucional y del Generalato del Rmo. Pa- dre jnan de Valencia! 4.2 Fundándome en que Denominatio desumitur á majorí parte amaré «Libro de las Custodias» á éste, que con razón debe ocupar el cuarto lugar. Compuesto fué, es cierto, para dar cabida en sus tres-