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3. Cómo vivir auténticamente el evangelio: ExhCl. Los grandes hombres suelen tener rasgos caracterís– ticos por los que se les distingue y recuerda. Uno de los típicos de Francisco era el que le gustaba decir las cosas al estilo de los jugla res, cantando cosas senci– llas en unas letrillas simples. No era un superficial modo de diversión, sino una manera de decir cordialmen– te la fe que anidaba en su corazón. Francisco cantó tam– bién para Clara y sus hermanas (lee LP 85). Este escri– to, descubierto en 1976 (léelo en BAC p.127), parece ser la letra de aquellas canciones (ver: LP 45 y EP 90 ) . El canto contiene los elementos de la honda espiritua– lidad de Francisco: la fidelidad al evangelio como ver– dad de vida, el valor de la obediencia hasta el fin, la decisión propia del cristiano, la so licitud con el hermano, la paz como situación última del que ha sido salvado, una invocación final a María. El modo evangé– lico de vida sintetizado es un pequeño y hermoso canto. 4 . La última palabra de un hermano: UltVol. Este corto escrito se grabó profundamente en el corazón de Clara ya que, al igual que la FVCl, quedó con signado en RCl 6. Fue escrito en los últimos días de - la vida de Francisco, a finales de setiembre o princi– pios de octubre de 1226. En él queda plasmada la última palabra de Francisco, palabra de un hermano querido em– peñado en una tarea común. Efectivamente, Francisco ha seguido personalmente el camino de la pobreza al estilo de Jesús (v.l); por eso puede decir a Clara y sus hermanas que no se aparten nunca de lo que, para él, es nuclear de l segumiento: vivir pobre como pobre vivió Jesús (vv.2-3). Esta lec– ción la aprendió Clara a la perfección. Su lucha por el ideal franciscano se centró en un empeño, evangeTico a más no poder, por vivir sin posesiones, sin intluencias, sin derechos, pobres corno el mismo crucificado.