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cansará de aconsejar a sus hermanos que recen esta ora– ción. La oración está centrada sobre el amor soberano de Dios y la búsqueda incansable que de él hace el hombre a tre– vés de su prójimo. Y la razón de toda esta orientación de vida es siempre l a misma: fue el camino de Jesús. Así esta oración es como un pequeño resumen del Evangeli o. Es el don de l mensaje que e l creyente recibe agradecido. Co– mo un don hasta conve rtir lo en oración. 3. Una le tanía de alabanzas: AlHor. Este escrito del que ignoramos absolutamente su fe– cha es admitido por todos como auténtico de Francisco, aunque el escrito se haya compuesto con frases de la Es– critura . Los versos están tomados generalmente del Apoca– lipsis, con un estribillo que bace de esta oración una es– pecie de oración litánica : "Y alabémosle y ensalcémos l e por los siglos" . A veces se ha dicho que el Cristo de Francisco es demasia– do "terreno"(?) mirando demasiado al Jesús de la hist.o– ria y no tanto al Cristo de la fe. Posiblemente son divi– siones que nunca las tuvo presentes Francisco. Pero por si quedara duda, esta oración deja bien clara la visión gloriosa y pascual delJesús triunfan te en el cie lo . Por eso misrnó es una oración hecha para la alabanza pura y Francisco la repetía varias veces al día, antes de comen– zar a rezar el oficio divino. Efectivamente , es una oración para ser repetida, una es– pecie de l etanía. Francisco se inscribe así en ese modo orante que ha cundido tanto en l a Ig l esia de Oriente (prototipo es la "orac ión de Jesús" : "Señor, ten miseri– cordia de mí'' ): repetir una frase bíblica casi a ritmo de respiración para que brote fáci l y espontánea la ala– banza. Es el talante mís t ico de Franc isco el que asoma en oraciones corno ésta. Por l o demás, esta oración desvela bastante el talante orante de Francis co . El ha hecho oración con la Escritu– ra en la mano, él ha aprendido a rezar con las palabras