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za (puedes leer Jordán de Giano 17, si tienes a mano la revi sta Selecciones de Franciscanismo" 9 (1980) 245-246). 4. La sombra de una duda. Esta situación no deja de levantar en el ánimo del l ector del hecho francis cano la sombra de una du – da : lLa estrategia evangélica de Francisco fue capaz de mantener a la incipien te orden en el cauce del idea l evangélico? lNo quedó Franc i sco desbordad o por una si– tuación que él no hab í a previsto? lSiendo, como lo era, hombre s i mple y sencillo, no se le escapó de las manos todo este hondo y complejo asunto de la orden como es – tructura? Las preguntas quedan ahí, presentes y has ta amenazantes. Estaríamos tentados de decir a todo ello que sí, viendo la trayector ia posterio r de la antigua familia franciscana. De todos modos lo que s í queda claro es que Francisco hizo todo lo que p udo y supo para dejar a sus herma n os l o más valioso de su heren – cia: que lo que de verdad merece l a pena viv i rse es el santo evangelio de nuestro Señor J esucr i sto. Los aman– tes de l o franciscano escuchan cada día la llamada a ser fieles a esta herencia. TRAS UN VIAJE A PALESTINA PARA PREDICAR PACIFICA– MENTE EL MENSAJE VE JESUS, AUN A COSTA VEL MARTI – RIO, FRANCISCO HIZO UN ESFUERZO POR MANTENER A SU NUMEROSO GRUPO VE ~ERMANOS EN . EL CAMINO EVANGELI– CO ACEPTADO VESVE EL PRINCIPIO. PARA SALVAR ESTE IDEAL AMENAZADO POR EL DESEO VE ORGANIZARSE AL ESTILO VE LAS GRANDES ORDENES, FRANCISCO PIV~ UN CARDENAL PROTECTOR QUE LO MANTUVIERA EN CONTACTO CON LA IGLESIA, RENUNCIO POR CRITERIO EVANGELICO A SU JEFATURA EN LA ORDEN Y ESCRIBIO UNA REGLA CON LO MAS NUC LEAR VEL EVANGELIO. AS1 SE SALVO EL IDEAL EVANGELICO A PESAR VE LAS V1F1CULTAVES Y SOMBRAS. E d-l.ta : CAPUCHINOS DE NAVARRA-CANTABRIA-ARAGON · COMISION PROVINCIAL DE PASTORAL JWENIL.