BCCPAM000591-3-11000000000000

razon y corta filosofia del paganismo; miles. que no po- demos desconocer, 4 no ser que queramos embozar nues- tra razon, eminentemente ilustrada por la fé, entre la tosca ' corteza de la brutalidad. Nos enseiia la experiencia diaria que, ademas de las consecuencias ulteriores y funestas eternamente para el alma que se entrega al pecado, tie- nen estos males tanta influencia en la existencia del hom- bre en este mundo, que 4 las veces acibaran todos sus go- ces inocentes y permitidos por la ley divina, y cortan el precioso hilo de la vida precaria que pasamos sobre la tierra: jtantos son los estragos queel hombre se causa & si mismo por no obrar siempre en conformidad con los preceptos divinos, que deben pautar su libre albedrio y llevarlo sin cesar & su propia felicidad! Este principio es infalible 6 incontestable; demos, pues, 4 uno de los hombres mas sabios el encargo de tratar delicadamente de la causa de estos males; exijale la so- ciedad que descubra entre los arcanos de la sabiduria todas las consecuencias de la inmoralidad , para ponerlas. de claro ante los ojos de la muchedumbre y conmoverla; veremos, desde luégo, que el sdbio se presenta con todo el aparato de un legislador, que echa mano de todos los resortes de la elocuencia humana, para deleitar desde - luégo el principio con imagenes patéticas; formaré unbello cuadro, parto de su facundia, entretejido con mil tropos, en el cual represente todo el horror del crimen;. pasaré luégo 4 persuadir y convencer, y despues de haber pero- rado largo tiempo, quedaran las costumbres en el mismo estado, y los esfuerzos del orador se veran esterilizados; larazon es muy sencilla: el que hablo fué un hombre. Pero hable Dios; digase aquella voz que hiende los cedros del Libano, y vereis cémo sus acentos traspasan el corazon y lo derriten, llegan al interior del alma y la hacen estremecer; cuando habla este Sér divino, gcreera el filésofo que sus palabras, sus consejos y preceptos