BCCPAM000591-3-11000000000000
‘cuando emplea su vida en ofenderlo, queriendo antes sa- car bienes de los mismos males, que impedir que éstos eo existan. Esta es la admirable economia de la Providencia - respecto de los séres libres , y abusando éstos , como abu- - san, de los dones del cielo, convierten sus facultades en instrumentos de su ruina, levantando su mano contra Dios y declarando la guerra al Omnipotente. (Job., xv, vers. 25). Si; es necesario que existan en la sociedad hombres malos, que causen escandalos y sean causa de ° ruina para otros; pero jdesgraciados de ellos! dice el Salvador; fuera mejor que , amarrados fuertemente 4 una piedra de molino , fuesen arrojados al profundo del mar: WVecesse est venire scandala, etc., etc. Es necesario, amados mios , que pensemos con deten= cion en estas palabras de Jesucristo, porque yo no en— cuentro en el sagrado Evangelio una expresion que en- cierre tanto en tan pocas palabras; todos los vicios , todos. los excesos , todos los pecados, son nada en comparacion de la misericordia de Dios; por pecador que sea un hom- bre, apenas reconoce su iniquidad y levanta los ojos al cielo, queda perdonado; pero al oir lo que dice Jesus del hombre escandaloso, no parece sino que se agota su mi=— sericordia, y que los raudales de su bondad dejan de correr; da sus fuerzas al ladron, al parricida, al adultero © y al sacrilego, y parece que quisiera no extender su po= \ tencia conservadora al escandaloso; pues dice que antes de llegar el momento de causar escandalo, seria bueno lo precipitasen encadenado al profundo del mar. ;Cosa extraiia! Dios, que conserva la vida 4 todos los bombres, quisiera quitarsela al que ha de dar escéndalo: ay por qué , amados mios? Porque fuera mejor que se perdiera el cuerpo que no el alma; porque es casi irremediable la ruina eterna del escandaloso; porque apenas puede ex- tenderse sobre él la misericordia de Dios, y, en fin, por- que es casi necesaria su condenacion: Ve homini illi/ , es .
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz