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do. Qué plan se propusiera el autor en escribir tanta” Cc ai 7 ad r “ . ‘ eS : frase envenenada, seria dificil adivinar, por ser real- mente el escrito bastante oscuro: pero en esto anduvo claro, diciendo estas palabras: El movimiento se inicié. _ Ahora es preciso halagar mucho d esa seitora del mundo, como hicieron nuestros mayores con esas monarquias, que vienen debiliténdose desde el 89. & fuerza de tanta destreza como han tenido aquellos en pintar é reyes y & pueblos eras de felicidad y edades de oro, que iban a venir. _ Sentimos un dolor profundo, cuando leimos tanta diatriva contra la Iglesia: nos fué muy doloroso, el ver que eseritores que se gloriaban de catélicos,'y aun men- — digaban la aprobacion de la autoridad eclesidstica, y aun se gloriaban de tenerla, aunque hubiese sido subrep- ticia, como luego lo supimos, fuesen los que,tomasen la _iniciativa para atacar 4 la Iglesia en su constitucion divina. Tambien nos fué sensible que un escritor, que: “ha mereeido el nombre de razonador frio, se distrajese tanto en su eserito, que se metiese 4 catedratico de his- téria & lo poético y romAntico, pues al describir los an- tiguos concilios, dice, que la autoridad de los Papas fué limitada y coartada en ellos: y que alli se vid una cosa - parecida 4 aquello de las asambleas de los barones con su rey, 4 quien decian: Nos que, cada uno valemos tanto como vos; y todos juntos mucho mds que vos. Sentimos — toda esa pena, porque aun no habia hablado el Vicario de Cristo, y ya se queria levantar una cruzada contra él: cruzada, que el autor mismo califica de impia, pues él mismo confiesa, que sus mayores son los que han derribado las monarquias, engafiando 4 reyes y pueblos con los prineipios del célebre afio 89. del siglo pasado.., Como el Sumo Pontifice no habia hablado, no debia tampoco hablar ningun obispo: asi es, que suplicamos 4 los Sres Redactores de Ex Pensamrunto Espasou, que se sirviesen permitirnos insertar en tan aprecia- 4 ai