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f ‘oF 32 del mundo, En el sistema de Arrio el mundo se habia alimentado intelectualmente de falsedades é impostu- ras: la narracion de Moisés sobre la muerte eterna del linaje humano por la prevaricacion del primer hombre era una impostura mitolégica: los patriarcas unos ilu- sos, Moises el primer impostor en haber prometido la venida de un Steg semejante 4 él, pero mayor que él, 4 quien debia oirse so pena de no ser escrito en el - -libro del pueblo de Dios quien lo despreciase: tan im- postores como él aparecian los profetas que lo descri- bian, y tan ilusos como sus padres los hijos del pueblo fiel, que lo esperaban: la razon arriana convertia en puros mitos los hechos mfs grandes del mundo, y des- honraba 4 Dios hasta el extremo de dejarlo desposeido de lo que es su gloria especial, de su fidelidad, de su veracidad esencial, pues habia dicho infivitas veces que el pecado lo ofendia infinitamente, y al fin se contenta- ba con la espiacion de una criatura, que noera mas que los mismos prevaricadores. : Y zqué venia 4 ser Cristo para la-razon arriana? iqué los apéstoles? gqué los martires? jqué la Iglesia? gqué el linaje humano? Jesucristo, que habia dicho que él y su Padre eran una misma cosa, (1) que su Padre lo habia enviado (2) que él era el principio de todas las cosas (3) que era Hijo de Dios, y que habia de venir 4 juzgar al mundo lleno de gloria y magestad: (4) Jesu- cristo, que habia dicho clara y terminantemente 4 sus apdstoles que era el Hijo de Dios vivo (5) que los en- viaba al mundo como su Padre lo habia enviado 4 él * (1) Joan. cap. 10. v. 30. (2) Id 12% 49, (9): Ide Ba RF AS, (4) Mat. cap. 26 v. 64. (5) Mat. cap, 16 v. 17. a