BCCPAM000549-1-40000000000000

proyecto y con las 50.000 pesetas de una, y con otras más de otras, se construyó una hermosa capi- llita-escuela. Junto con un pequeño dispensario y almacén para provisiones de víveres y ropas. Inaugurada la capilla con solemnidad inusitada se comenzaron en la misma los actos religiosos, la instrucción catequística para grandes y peque­ ños y los servicios sanitarios y humanitarios, así como clases para niños, consiguiendo que el Mi­ nisterio enviara un maestro nacional para esas clases. A más de esto, se consiguió del Ayuntamiento que un tanque de agua pasara dos veces a la se­ mana por el barriopara abastecimiento del mismo. A la práctica de las obras de misericordia en favor de esta pobre gente contribuyeron, a más de las Misioneras de María, las Hermanas Misione­ ras del Suburbio, varias de las cuales se trasla­ daban por las tardes al bar io para enseñar a las chicas mayorcitas y para dormir por turno en una de las cuevas, dando así testimonio de fraterni­ dad. ¡Y con qué alegría lo hacían!... Lo recuer­ dan actualmente emocionadas, ¿no es así, herma­ na Bienvenida?... Lo recuerdan, digo,y lo recuerdo, porque también yo tuve la satisfacción de pasar algunas noches durmiendo en la llamada «cueva del Padre», sin que fuera obstáculo para ello ni la visita que una de esas noches m e hizo un anti­ pático bicho, que m e acarició la barba, ni el quedar medio congelado otra noche, a causa de no poder abrir la puerta de la cueva. 30