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la Sagrada Congregación disponía acerca de cada una de las materias contenidas en los estatutos, hizo resaltar lo más conforme con la mente de la Iglesia en los actuales tiempos y circunstancias. Tuve que redactar por tres veces otras tantas constituciones para acomodarlas según la mente de laSanta Sede después delConcilio. Los originales de estas pruebas constituciona­ les, con las tachaduras, correcciones y adiciones, tales como me fueron devueltos de Roma, se con­ servan como recuerdo para la historia de la Con­ gregación en el archivo de la casa madre. En conformidad con todas las indicaciones ora­ les y escritas de los Consultores de la Sagrada Congregación de Religiosos, a más de lo aconseja­ do por la experiencia, se procedió a la redacción defintivade las Constituciones, que servirían de base para la aprobación de la Pía Unión como Congregación Religiosa. Las constituciones, ya redactadas en conformi­ dad con lo expuesto, merecieron el visto bueno de los mencionados consultores y el del Obispado de Madrid, con fecha 15 de marzo de 1971. La aprobación es temporal, «ad experimentum», hasta su aprobación definitiva por parte de la Sa­ grada Congregación. Las presentes Constituciones por las que se ri­ gen las misioneras franciscanas del Suburbio, y a las que deberán acomodarse para la uniformidad y espiritualidad de las mismas, vienen a ser un concienzudo resumen de los primeros estatutos. Conservan el primitivo espíritu religioso y fran­ 216