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DEL InusTRÍsIMO SANTANDER. 313 mas dificil su direccion, como decia con muy doloro- sas expresiones nuestro Santísimo PadrePioVI!., en su primera exhortacion álos Cardenales, inmediatamen- te despues de su elevacion al Sumo Pontificado: en unos tiempos en que se aflige demasiado á los sa- grados ministros de la Iglesia : en unos tiempos, en fin, en que nada oimos con mas freqiiencia que re- petir órdenes para tomar las providencias mas se- veras sobre los establecimientos. religiosos : en unos tiempos tan tenebrosos como estos volviamos la vis- ta á todas partes, y no hallabamos donde poder consolarnos. Parece que nos habia circunvalado el Señor conun muro impenetrable de tribulaciones, y podiamos muy bien repetir con el Profeta Jeremías: Conclusit vias meas lapidibus quadris. Pero al apa- ,recer ¡ por.la segunda vez en este. mi amado pueblo, al mirarme en vuestra respetable presencia, respi- ró mi afligido corazon con la reunion de vuestra fe y la mia, con nuestra mútua caridad, y. nuestra uniforme oracion, Ved. ahí tres cosas de absoluta necesidad .para salvarnos, y para que en la guerra, que vamos á hacer al infierno con la: santa Mision que empezarémos mañana, formemos un batallon im- penetrable con el que venzamos al Demonio, edifi- quemos al pueblo christigno , y glorifiquemos 4 Dios Rr