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TUE a » PP. A RO TR RA ; AAA gr6 «Cartas FAMILIARES! 330 creerlo así.es necesario haber perdido todo sentido, Siendo esta una verdad de hecho iudisputable, el abandonar este establecimiento, es abandonar la obra de Dios conocida como.tal. Vm. ayudado de la divina gracia ha trabajado con tanto esmero, que ni ellos hubieran subsistido sino fuera por Vm:., ni sub- sistirán «segun la ordinaria providencia del Señor, si WVm. los abandona. Para ellos Ha llamado. Dios 4 WVm: , en ellos: ha bendecido sus trabajos: los pobres, los enfermos, los encarcelados, los pecadores, las religiosas , el clero , á-todos han'alcanzádo l s bue- nos efectos de stis sántos y apostólicos trabajos; ¿y abiora sin mias ni mas quiere Vm. abandonarlos to* dos? Digo sin mas ni mas, porque“ por imposible habrá hoMmbré juicioso en el ¡un do quele ae Vi. dictámen para lo-contrafio-, 4 no'ser que quiera de Xarsé llevar de algun afecto particular, y no de la gloria de Dios”, sind que todo es artificio del enemt- go del hombre, el que por medio de-algun disgusto, de al¿ua resentimiento, de alguna ¡iúgratitud 7'Ó'co- sa semejante, quiere destruir. la obra de Dios, y precipitar á'Vm. Amado de mi alma, ¿qué va Vm. á buscar 4 N.? Riquezas? Yo sé que no. ¿Hono- Fes. Ménos. ¿Descanso? Tampoco. ¿Trabajos? Esos sí, 'es0s voy á buscar, me dice Vin. Pues bendito