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Sobre la exístencia de Dios. J hombre? Unos para alimentarnos, otros para ves- tirnos, estos:para calzarnos , y aquellos para:de=) fendernos y aliviarnos en los caminos, en las ba- rallas., em las. fatigas delos. campos y :en los transportes del comercio. En este estado de co- sas el mundo se pareceria á un taller, lleno. de ricos materiales y -finisimos instrumentos y pero sin obreros qué trabajasen en él : pareceria á una: habitacion ricamente adornada y preciosamente iluminada ¿ pero cerrada enteramente á todo es- pectador : páreceria á una mesa, cubierta con esplendidez y finura, pero sin convidados: pare- ceria á una cátedra, en que la naturaleza , como maestra sábia., enseñaba las ciencias y las artes, pero sin un solo concurrente á sus lecciones. Se- parad del mundo al hombre, y le quitareis el alma, y dareis la muerte 4 toda la naturaleza : volved el hombre al mundo , y vereisle todo animado y vivificado. Cada sér-tendrá su destino , su uso. y su utilidad. Nada veremos de mas, nada de ménos. Pero si quitaramos el mundo al hombre, ¿qué nos quedaria?.¿ Hariamos otra cosa que privarle de todos sus miembros , de todos sus sentidos, de la mayor parte dde sus facultades, y, casi añni- quilarle ? ¿Para qué. sus ojos , si mada tenia que ver? ¿Para qué:el sentido del, oido y:si nada te- nia que 0ir2 Para qué el. paladar y el olfato , si nada tenia que 'oler'ni gustar? ¿Qué uso haria-de sulengua,.de sus pies, de sus manos, de su ¡mars ginacion y de su memoria ? Pero volved á. poner el. hombre en el mundo ,.ó dad;¡el mundo al hom- pe H | q E rá EN > pa

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