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Sobre la exfstencia de Dios. 31 pequeña la'criaturá para comprender en su en- tendimiento las perfecciones del Criador. Justo es que se rinda la debilidad humana á la vista del Omnipotente ¿y este homenage de respeto, de adoración y de humildad , sea una confesión pública de'vuestra existencia: Sé que mi Reden- tor vive : sé que Dioses Dios: que'es el que es, y no lo fuera si mi corta vista pudiera verle, mi lengua explicarle, y mi entendimiento compren derle, Procuremos exigir una confesion tan pro- vechosa de los partidarios de la incredulidarhi' PRIMERA PARTE. Nosotros existimos; ¿pero quiénes sómos no. sotros ? Somos una cosa compuesta de dos mby diferentes. La una piensa, y la otra no. Á la pril mera llamamos alma, á la segunda nombramos cuerpo. Este es materia”, aquella espíritu; y esté espíritu y aquella:matetia componen , fórmánvy constituyen el hombre. ¿ Pero.en qué tiempo y de qué modo, estos dos séres tan diferentes en su naturaleza y en sus propiedades; *se har reunido para formar ese úno, ese todo. , ese compuesto; á quien llámainoshombre? ¿Hemos llstido sión. pre? ¿Nos formamos á nósótros mismos ? Es evidente quetodos los presentes existimos de un siglo 4 ésta parte, y que-es del todo imposible obrar ántes-dé sér, lo qué seria” preóisó 5 si nos húbierámos formado 4'nootros mismós. Tódos vé- mos qué han pasado millares de años miéntras per- maneciámos en la nada ; todos vemos centenares