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$ .a Del amor frande que nos tiene Diós. 34 ndo, iva bolviendo la cabeza atrás; como 3 yér fi alguno le feguía; y que eftebolver la cabeza, rafgava las entrañas de verle trtan lolo;y la viíta con ra ÓN apacible, y amorofa,que le llevava el alma tras de sí con deíeo de feguirle, y de ayudarle a llevar la Croz.Y acabado de fubir al monté; fe le moftro lentado en un rincon muy ¿fligidos el codo ar:imado ¿2 las rodillas, y la mexiila lobre la mano, como bra: erfona que eftá muy mada, olvidada de todos, defechada, y abatida.Y de averlo viíto aísi ela a lierva de Dios, dixo a lu Confeflor, que huviera muerto de dolor, lino Ja huviera confortado, y confervado la vida aquel Divino Señor. En otra ocalion elta miíma fierva de Dios, dando por obediencia cuenta de fu efpiritu al dicho fu Confeflor, le dixo: Avri, Señor, mas de quinze , dias,que todas las yezes que entro en la Igle(a,hafta que lalgo,fe me ofre- ; ce 1 la vilta Cbrilto Crucificado; y uno de eltos dias , eftando delante de Nueltra Señora del Sagrario, y algando los jos para mirarla, viánueítro Redentor Crucificado, y tán af gido al parecer, que no st que pudielle eltarlomas el dia de (u Pafsion; y entendí, que las ofenías que le hazian las almás, le tenian aísizy laliendo de la Iglefia, le vien la calle, bufcando un corazon donde entrará defcangar. Y otro dia de la Cruz dixo tambien que yic abeto. y derramando mucha fangre, y que le dixo v Mageltad: Hija, mira qual me tienen los pecados del mundo, recoge en ti efta Mere: y ofrecemela por los pecadores. a San Pedro Damiano refiere, que un Barbero hurtó 4 un pobre uñ mar- Epift. 8 fano, y luego en trage de pobre Hego Chrifto 4 la puerta del ladron con el ad Do., cabello muy largo, y disforme, moftrando tener necéísidad del Barbero; avs, 0.3. el qual luego tomo las tixeras, y comengando con ellas a afeytarlo, lé ba. llo debaxo del cabello dos ojos, y admirado el oficial; le pregunto el mila, terio de ellos: y fu Mageltad le refpondió Yo mé llamo Jesvs, y todo lo conozco, y con eltos vi el marrano , que poco haiquitaíte al pobre.Con efto delapareció el Señorsy el hombre pafmado de fu grande amor, relli- tuyo luego, y fe enmendó. El Padre Andrade refiere un caío notable; que yo ceñire aquí. Dize; ¡Andra. Mes, que huvo en Iralia un Predicador. que por eltár tan rendido al vicio grad. 7» desibneno le parecia impofsible enmendaríe y y eltava delelperado de $. 14» fu alvacion, y de la piedad de Dios; pero lu Mageftad le dió muchas al» - dayadas, recuerdos para convertirlo ; y entre otros, un dia andando á cavallo, $ acometió un animal cerdolo de eltraña grandeza, y le hizo AMOO reco, y peligrolo. El fe biene por algunos dias; teniendolo pór avilo de Dios ; pero pareciendole que era impolsible en- mendarfe, y aver mifericordia para él, bolvió 4 fus vicios , y luego Dios h 1 re rdarle; pues con ocalión de ayer predicado un dia de la gran miferig E Cordia de Dios, y de eliamento ¿Mor con que recibe 4 los pecadores, fe E Tevango de el auditorio un hombre, y dixo con voz alta; Al Padre Predi. | Z cador