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o Ss o De la len: q Pad dis, que los que procuraban que las almas le recibiellen,le daban grande gulto,afsi como fe le daria grande á vn Principe, amigo de tratar con ni- s,el que fe los traxelle,para que con ellos fe entretuviede, + Tambien nos dize Chrifto digamos: Perdonanos nueffras dendas, af como nofotros perdonamos, para enfeñarmos, que no nos perdonará, fino. perdonamos. Efcrive Enrique Gran,que huvo vn hombre enemiltado.con otro;y pormas medios que [e tomaron,nunca quifo reconciliaríe con el:y como no lo hizo en vida,tampoco en muerte. Y aviendo muerto aísi, y el- tando fu cuerpo en la Igleña,y los Sfcerdotes cantandole el Oficio, al dezir no la leccion:Parce mibi Domine, vn Crucifixo que eftaba delante,delen- elavo las manes,y tapando con ellas los oidos, dixo:Pues el no perdono, tá- Gran (x.642 * poco le perdonare yo. Y entendiendo con elto los Sacerdotes, que fu alma 31 condenada,no pallaron adelante,niquifieron enterrarlo en fagrado. + Blofio refiere,que huvo vna Santa Virgen,.que preguntada como avia - Megado á tan alta perfeccion,y á ler can favorecida de Dios? Refpondioó: Todos los trabajos los tomé con gran conformidad como venidos de la mano de Dios:y a qua!quiera que me hazia alguna injuria,O me daba algu. na moleftia,procuraba hazerle algun particular beneficio, y á ninguno me quexe de injurias ni trabajos,fino folamente acudia ¿ Dios, del qual recibia - Y no nosdexes caer enla tentacion: al intento de la explicacion de efta peticion, dize San Sofronio,que vn Monge muy Santo la explicaba á otros, diziendo:Quando rogamos al Señor,que no nos dexe caer en la tentacion, no le pedimos,que no feamos tentados,porque noes poísible dexar de fer. lo; lo:que pedimos es, que no leamos vencidos de la tentacion, haziendo alguna cofa que defagrade a Dios.Los Santos Martires tentados fueron por las tormentos, mas como no-fueron vencidos,no entraron en la tentacion, pi cayeron englla, | —uirálenanós contratodas las tentaciones, refiere el Prado Ef eS Al itual,c ue Gel Abad Theodoño fuelle al delierto le tomó de la ma- no Chrifto: ¡endole en vn palenque,le dixo:Tu has de pelearcon 'n demonia terrible, Y como-mirafle ¿todas partes, le pareció,4 veia mu- chos veftidos de blanco por vna parte,y por otra macha gente trifle, y en- lutada: luego apareció vn Gigante terrible,cuya cabeza llegabaá las nubes. Blof: Monil. cap. 10. Flor de Jentent, CAP. I5. Comengo a temblar có lu vilta, y dixole á Chrifto:Como quieres tu,Señor, ' ue vn hombre cercado de carne,y enfermedad, pelee con elte Gigante? Y, el Señor le relpondio: Ten buen animo, yo foy contigo:y apenas Theo= dofio comengo a pelear,quando llego Chrifto, y le puío vna corona en la cabeza, y aclamaron todos los veltidos de blanco: Vidoria,viétoriazy luego todos los demonios,que cran los enlutados, deflaparecieron, y los Angeles . alababan a Dios,diziendo: Ayudador eres, Señor,en las necelsidades. Qu Y