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De la Confefsion. 217 y ¿omian los ojos; por los oidos !a entraban,y falian faetas de fuego; dos crueles ferpientes la delpedazaban los pechos, y con las colas la ceñian la garganta. Del affombro cayeron en tierra los Religiolos,y recobrados luex go,les dixo era para empre condenada, por aver callado por verguenga vn pecádo. Elte dragon, dixo, es el demonio que me engañó para que lol callaffe, y me atormenta terriblemente en las partes mas delicadas de mi cuefpo: las lagartijas,y fierpes caltigan las culpas que cometi con la demas fia de aderezarme la cabeza,y cabelloó:los dos fapos con eltremados dolores comen las niñas de mis ojos,en pena de las viftas deshoneftas : eltas lacras de fuego caltigan las mormuraciones,y los deshoneítos cantares,que cana te,y ol cantar: las dos ferpientes me roen los pechos,porque los defeubri, y, dexc palpar: eltos lebreles me muerden, y comen las manos, en pena de lo que con ellas toque,y porque di 4 misamadores lo que era mas debido 4 los pobres; y de todoseltos,y otros muchos tormentos eternos me librára, (E como confeíse los demás pecados, confellara el que calles: dixola el Con felTor: Dime,qué pecados oh los que llevan mas almas al infierno ? Y ref« pondiole: Delos hombres por todos pecados ay muchos en el infierno;pey so las mugeres fon muy muchas las que fecondenan pór quatro pecadosy felsion,y por agueros,y heghicerias;y donde efte pecado falta,ena tra á condenar el pecado “de murmurar. Conelto la levantó con nueva crueldad el dragon, y con laftimofos gemidos,que iba dando,la llevo ¿les - pultar en los infiernos : y fus tormentos feráu fin fin, y de todos. pudiera averíe librado,y alfancar el Cielo con vna confefsion entera, y contritas Por los años de mil feiícientos y trece predicaba en Madrid elApoltoli- co PadreFs Juan Romero,de los Defcalgo SeraficoPatriarca,y al mil- mo tiempo vn hombre, que avia fido gran pecador, eltaba enfermo en el Ho(pital General;y aunque leánftaban que (e conteffafle,nunca lo hazM,di- ziendo,que le oirían lus pecados los otros enfermos; y efte eftando ya muy le peligro,falto vna noche de la cama;y a la a pidiendo en San ¡Contellor,feñalo el Prelado l dicho Fr. JuanRomero.Los que ¡ban o llevaron halta lacarlo por la Puersa de Alcalá; y aunque rezcló al- | delante, le dixeron: que en el campo cltaba el enfer- mo,y que moriría luego,y que dexafle alli al compañero. Hizolo aísi, y lo llevaron hafta el Arroyo,yPuente,que llaman de Brañigal:y ¿pocos paíos que dieron 4 mano derecha, hallaron al enfermo tendido en el fuelo entre vnos arboles, y ala orilla del Arroyozy entonces dixeron al bué Religiofo: Elite es,Padre,el enfermo,y de peligro tambien del alma,porá nó fe quiere confeflar: vuelía Paternidad le exorteá elio,que a(si lo ordena Dios, Que= dote a lolas,y por mucho que con fu Apoftolico.zelo le dixo,no fe reduxoj antes deziaDexeme, Padre dexeme,no me hable,no me canfe.Los menflas getos le llegaron,y dixeron; Padre, por vlimo le dezimos, que perfuada 4 j e : P. Pro Mar. de S.Jof. po 1.110,13 CAP. 21.

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