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28 Faz untemnor. como lo es una pluma agitada por el viento, jamas tomara la posesion de la paz. Este eulo -1 impetuoso, es el que turba mas la paz inte- rior de las almas devotas ,-ó al menos la im- pide mas comunmente. Las ocasiones de apa- sionarse y de disiparse, rara vez ocurren iá personas retiradas ; pero jamas les falta la ma- teria del celo. Ah, de qué bellos pretestos se 4 vale la actividad natural , para urrojarse á todo á su ardor! Dios es ofendido: los que hacen el ho mal, se pierden: los que son testigos, se es- i candalizan; es necesario detener los progresos 3 del desórden é impedirlos luego. Asi hablaban | ; los obreros arrebatados é imprudentes del Evan- | gelio: Ya vamos á arrancar esa mala verba: 3 Imus , et colegimus 1. Pero el Padre de fami- lia, mas prudente y tranquilo, sin ser menos celoso, los contuvo señalando “4 su actividad por precisa calma, todo el tiempo que habia de correr desde el macimiento del trigo hasta la siega. Impacientes celadores! Subeis lo que | item vais á hacer? Desde la primera entrada de esta pasion devota que os inflama, impedirá vues- tra precipitación la obra de un justo discer- nimiento, lo confundireis tudo, y atropellareis con el grano bueno , corriendo contra el malo; o en fin lo arrancareis todo de una vez, por- que ambos se tienen y sostienen uno al otro. Ah! Si vosotros estais tan empeñados en qui- tar todo el mal, comenzad por el que teneis Mas cerca, que ciertamente insta mas: volved A A AA a ES DoS 1 Matuh. 13, 28 o IEA III