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332 Paz interior. lleva el múvimiento del espiritu de Dios *; y andad comio ellos siempre delante de, vosotros mismos, sin preguntar á dónde os lleva y sin volver atrás 2. Temeis muchas veces que Os lleve muy lejos : pero cuando el movimiento es conforme ú las máximas de la perfeccion, y mo opuesto á las reglas de la prudencia; y edando al contrario la yivlencia que Os acosa, es favorable á la indolencia, al amor propio y á la concupiscencia : es facil conocer, que ¿ale de aquel principio esta incertidmbre; y sóla Ta duda debe haceros determinar No mi- pois 4'los otros. El espiritu de Dios inspira á donde” quiere. Nadie' hay que se le pase; y lo qué obra Dios en el+corazon del hombre, es”el espiritu del hombre mismo. Y despuys de todo. cualesquiera que pue tan Ser los de- seos de Dios sobre los otros y su modo de responder a ellos, siempre harán cuenta con vosotros los movimientos de la gracia; “y Os será duro Y funesto resistir contra el aguijon, jue 0s picará sin cesar 3. Mas porque la pe- véza y el Demonio os haren: fener comuil- ménte donde no 'liay niatería de temor; he aquí lis señales por “las euales podreis discer- nivel verdadero movimiento , del falso. UH. Primera: Elverdadero movimiento mira las Leves y alos superiores que las hán hecho: dl contrario. el falso se prefiere “4 "las Leyes 4 Ubieratimpetas spicitas, ¡Wie grabiebimtur, Ezech.t. Y.,12 —.2 Unumgnodque eorum coram facie suá,ambu- labat , nec revertebantur, cum ambularet. Ibid. — 3 Du- rúm estoibi contra stimulum calcitare. Att. 26, y. 14.