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268 Paz interior. verdaderos Ángeles de paz lloran amargamente por lo que estos no lloran !. Lo que yO “pues púrsuado es, la Paz interior , la cual poseida siempre, sube tomar los tiempos y las pro- pias medidas, para reprender econ fruto; y ul menos saca siempre grandes ventajas, que consisten en la mortificacion de las pasiones. Y lo que yo reprendo es, el celo impaciente de un natural indómito, que hace de un igual un temerário, y de un superior un turbulento. XIHI, No dejemos pues. turbar la paz del alma. por el pesar de ver los defectos del prójimo y por la impaciencia de corregirlos. Cuando nos aplicamos a la correccion que es- tamos obligados á hacer cuando nuestra acti- vidad se haya debilitado con el tiempo por nuestras ri flexiones, habiéndolo meditado todo en presencia de Dios: observemos de ccrca todos nuestros movimientos para no dejar turbar la paz de nuestro corazon. Pesemos todas nuestras palabras , regulemos todos nues - tros modos para no turbarla en los otros. Ha- hlemos poco. Una palabra que sale del fondo de la modestia. del récogimiento y de la ca- ridad, lo dice todo y hace mucho: pero un grande número, no' hace mas que ofuscar y nada obra; y este es un ardor que se disipa Luego se percibe todo lo que quereis decir, y lo que estais obligados 4 decir; no os apu reis pues sin necesidad y con riesgo,. osten tado todos vuestros pensamientos, cuando ul a 3 Angeli vacis amaré Mebunt. [sai. 3. y *.