BCCPAM000545-1-05000000000000

Praclica. 191 rupcion de que estoy lleno, desapareceria al instante. Mas yo siento una estrema flaqueza, y mi corazon está agonizando. Yo no estoy en estado de orar ni de meditar: he perdido enteramente la paz del alma: y nadie me dice que volverá, sinó es con la reputacion, que me ha sido quitada injustamente. Y siento mi poca virtud, y me preguulo á mi mismo. ¿Si intento adquirirla sia practicarla? ¿ó si espero para practicarla, no sentir repugnancia alguna? ¿Y si se vá al Cielo cejando siempre, ó aban- zando siempre á pesar de los obstaculos ? Pero en fin yo me trato a mi mismo en esla:oca- sion, como a un enfermo flojo y timido. Lo compadezco; y dilato la operacion de la cura hasta que haya cobrado fuerzas y ánimo; pero siempre le exhorto á resolverse y disponer- se, porque eslá su vida en peligro, No es me nester sinó una palabra ingénua y modesta, para descubrir mi inocencia: la digo yen decirla, acepto al menos la humillación , que me sucede a mis propios ojos, y á los de las personas virluosas que «estan sorprendidas de ver el fondo de mi paciencia lan cerca de su superficie. Dice otro: Una persona está tan mal dispuesta contra Mi, que cuantas veces puede me en- cuentra , y me trata con el modo mas duro y me llena de ultrajes. Yo conozco que aun no estoy muerto á mi mismo , para sufrir esta afrenta con la tranquilidad necesaria. El fondo de amor propio que tengo, me Causa agilaciones violentas, que me quitan la A ema

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz