BCCPAM000544-1-04p26d00000000

_- 10 — que ansiaba también saber quién era la hermosa Señora, al verla el 25 de Marzo, como siempre, ro- «deada de luz indescriptible y con una bondad sin igual, se atrevió a decirla: “Señora, ¿tendréis la bondad de decirme quién sois y cuál es vuestro nombre?" La bendita Aparición sonrió sin contestar, Animada por su bene- volencia, Bernardita insistió: “Oh Señora, ¿querais tener la bondad de decirme vuestro nombre?“ Los resplandores de la Aparición au- mentaron, como si fuese crecien- do su alegría; pero tampóco res- pondió, Bernardita, extasiada ante esta hermosura, redobló sus ins- tancias, pronunciando por tercera

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz