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23 9F S siempre atadas corto y a buen recaudo, campan por sus respetos, con gran dafio de la sociedad. jLa sociedad actual! No llegaré yo a negar (jguarda Pablo!) que calce esa sociedad muchos puntos en todo lo que significa ciencia ¢ ilustra- cién, porque eso seria cerrar los ojos a la luz y hablar por no callar. Y aunque es verdad que flos de mi profesién han tenido con ella en sus respectivos paises sus mases y sus menos, y sus dares y tomares; y atin hoy mismo viven sobre un pie como las grullas y | con el alma en un hilo, porque escritores que be- ben en buenas fuentes publican a los cuatro vien- tos que sigue siendo la cuestidn clerical en los antros masonicos la cuestién del dia... pero jvaya! yo hago tabla rasa de esas paginas negras escri- tas o por escribir, y digo como los amigos que se quieren reconciliar /Borrén y cuenta nueva y pe- lillos a la mar! Si, sefior, no me duelen prendas, y si la socie- dad se gloria de su ciencia, yo que me glorio de mi imparcialidad, le diré; <jSea enhorabuena! y si Dios se la did, Salomon se la bendiga.» Quiere esto decir que pongo en ese sentido a la sociedad por las nubes; y con razon. Verdades que examinada de catecismo, se llevaria un suspenso como una loma. Cierto es también que andaria ten con ten para aprobar en. filosofia, especialmente en la filosofia de altos vuelos; pero menester es confesar que es ella el tu autem en bellas artes, que nadie le tose en