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EL B. DIEGO COMO PREDICADOR 321 ro confesarle sencillamen algunos dias á prevenir el sermon, dad, la que no me he vasto inútilmente el tiempo hasta que de man la alguna vez que se a el mismo dia, óÓ cuando más el ante ofrecid 1 €s, ignoro enteramente las reglas de la oratoria, y el modo de formar segun ellas un sermon. Es verdad que ántes de eoncluir los es tudios me puse repetidas veces á es tudiarlas, r la necesidad de prepa a rarme p: los exámenes y para a- prende: a predicar ete.; pero lO es tan bien que en todas me humilló Dios con negarme aun la inteligencia de los términos, de modo que nunca fuí capaz de comprender cosa alguna y siempre me fué preciso dejar aquel estudio "sin haber llegado jamas um á apren lerlo. Esto propio se ha rep tido 1 4 o despues en cuantas ocasiones ne 1n tentado este preciso est idio, estimu lado de la conciencia que me acusaba de ria sagrada ni profana, cuyas ninguna instruecion en la orato ricas ni en el siglo ni en la religion he saludado KEmpeci A] predicar, rá suelto á seguir el rumbo de proponer L. pro en 10s sermones un asunto 1 bar” ó convencer su verdad, y. per suadir á la voluntad ó excitarla á que la observe etc. Algunos años despues Í de este método, y de una suma inha bilidad para entender los . sermon impresos, singularmente los franceses ban como orácu ¡que entonces se 1 los, y de notar en mi interior una singular repugnancia a aquel metodo ut ! CIOCINIO PL py que mMut Hi v 1ba toda la atencion la sas rada Escritura por si le autoridad, y lOs 55. Padres por la que respectivamente tienen ete.: me encontré con 5. Bernal dino de Sena, en cuyas obras encon oO mu tré un método que se me ad: chi : lo ví en los ant guos e ntores S. Antonino, S. Buenaventura, 5. Al herto Magno, y otros predicadores di igual tiempo, y desde entónces me propuse el pudi se, Ya veo qu e disto m cho de en el modo que Ñ ' ello en lodo; Jero quiero decir con esto, que mi modo de predicar lo ací modo de alguna manera al de los re feridos sanlos, segun el 1cIO que he formado. Confieso así mismo que ái tes de predicar no acierto á formar un sermon. Estudio cuando puedo, gularmente Stos. Pa vo los libros, sin dres v exposmktore Ss. mas si me dedico rior va ocurriendo el modo y el rum- le tener, segun las espe cies que he visto Ó me ocurren para el asunto. Son muchos los casos en que «he subido al púlpito con la an- oustia imponderable de no haber po- dido formar ni ménos vestir la idea, en sermones de empeño y de mate intrincadas; pero poniendo mi co- razon. con humilde resignación en la voluntad de Dios, pidiéndole se digne concederme que trate yo su Divina palabra con la dignidad, honor y res ¡ue la trata- ba su Unigénito Nuestro Redentor, peto (si es nosible) con « ! siempre he visto como de bulto su so berana asistencia y el Zigo dabo vo ¿Ss OS el sapte nt.am ele, 1037. « De aquí ha nacido en mí 0 ha dimanado un aprecio tan alto de la palabra de Dios, que no sólo deseo Inu nsísimamente proponerla con todo el mavor decoro que me sea posible, sino que quisiera ser capaz de no ha blar Ó proferir una sola palabra que fuese mia. Debo á Dios una miserl cordia part cular en esta veneración de su Divina palabra y así entre otros medios de que ántes y al tiempo mis mo de proponerla, me valgo, uno e decir: Domine, ín unione ¡llvus divot nal intentionts qua 1pse in lerris verbu Det tuun homintbus propo- SuLstt, oc — veerbum tuum ego pro pono; es más en esto lo que en min terior advierto, que cuanto puedo PX- pre Sar, porque mu pu 'ece que miro en él una cierta inmensidad que no al canzo á comprenderla suficientemente. 1038 « Ademas de lo dicho debo confesar que soy naturalmente muy es caso de discurso y de formar con- ceptos ideas ete en toda especie de asuntos, aun en aquellos que frecuente ó continuamente manejo 0 trato; y que lo soy mucho más estéril de voces y de expresiones para producirme, Só- lo en el púlpito no se advierte este ratural defecto. Mi ignorancia, amado rermano mio, e verdaderamente gran- de y desmedida, Si en los escritos no se conoce, es por especial providencia de Dios para 108 altos fines que yo ISNoOrProO mas en la realidad no has u sunto alguno ea el que fuere en que 21 a
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