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SERMONES, ENFERMEDAD Y años cumplidos de edad, estando re- cogida en la siesta del referido dia 9 y perfectamente despierta, oyó como en el aire de su. cuarto un ruido ex- el que conoció con evidencia provenía de natural. Es de de advertir que en esta trañio y pavoroso ; que no causa casa y familia se oyeron estos ruidos de suceder la muerte única de estos Señores, y extraños ántes de la hija despues ' padre, marido de esta señora viuda etc. (67 E « Todo este pueblo ha he cho tales extremos de rogativas, pro- mesas, ¡ pidiendo á Dios mi vida y mi salud, que no ántes tambien de morir su oraciones, ete, cabe en ponderacion. Dios se lo pague: me tenió si han conseguido que el decre difiera para más adelante (1). Para no errar puse desde voluntad, vida, etc. en las Nuestró Señor no queriendo otra cosa de to se revoque O se luego mi sacratísimas manos de Jesucristo: lo que más quiera Su Majestad y dis ponga. Ya ve V., Padre necesito de sus oraciones y de sus Aquel Religiosito ejemplar y extático de quien hablé á Y. en mi últin a, sigue muy favorecido de Dios, é mio, cuánto documentos, ete. insiste en la direccion con una eficacia no comun. Conozco que carezco de cuanto para ella es nece sario ; temo, me retraigo, etc.: pero estaré a lo que V. disponga » 668. - El Director de nuestro Beato le concedió su licencia para la direccion del jóven sacerdote prudente Capuchino de que se habla en el nú- mero precedente, v le dió ademas sa ludables avisos para su propia santi- ficación y espiritual consuelo. A lo cual el santo Misionero respondió (2): Dios me conceda la salud y el es píritu que necesito y de que carezco Asunto para mi tan sumamente oscuro, que es en- para estas direcciones. teramente nada lo que de él compren- , do: el Señor tenga misericordia de mí y de estas almas sus redimidas y es las, para que yo no se las pierda ni extravie; dre mio, no es decible, Pa- hasta donde llegan mis te mores por esto. 669. . Q No sucede así en las CO 1) En ' pues el B. Diego mur en 1801 Carta de Ronda, Julio 11% efecto se retardó, si len por poco tiem FTRABAJOS DEI BEATO EN. 1797 211 sas que V, me enseña respecto á mi interior, porque: su seguridad me hace vivir con descuido etc. He leido una y Otra vez la ya citada de V., confie- so me sorprendió el aviso de lo que quiere Dios de mi, al modo del que recibe la noticia de una gran enfer medad que esperaba pero no apetecía por considerarlo imposible, Unde hoe mila ? repite mi alma sin poderse con tener. y á la union con el Sumo Bien y vida de mi alma ! ¡Yo llamado á la contemplac on ¡ yo, que no he saludado de la vida espiritual las sendas mís ticas, que no he dado un paso por el camino del espiritu, que Ignoro total- mente lo que es vida 1 ritual, yo cieno de interior y iniquidad, juguoteo de mis pasiones, esclavo de mis ape titos, ete.! ¡ yo, que jamas he sabido lo que es oracion mental en sus prác espl ticas, siempre disipado, indevoto y ca medio de un amor entrañable y de un insaciable deseo de tenerla, y que en sus ejer cicios he cometido más faltas, tal vez, que minutos he gastado en ella, ete.! sl siempre en ella en ¡yo, que ni entiendo ni he pasado por as purgaciones activas y pasivas del sentido y del espíritu, ni he practicado cosa alguna de cuantas se dicen quo anteceden precisamente á la contem placion y union con Dios! 670. — « Esto y mucho más que no acierto á explicar ni á conocer, se me ocurrió prontamente al pensamien to, mas con serenidad, colegir de que no me tanta paz y cuanto puede v, ha resultado la más leve ZA, pusilanimidad ni desaliento, ántes bien todo lo contrario: porque pasadas 24 horas ó cerca de esta dulce sorpre- desconfian sa (no me ocurre otro término con que explicarme) Y Cono volviendo en mí sintió mi alma una repentina é instan tánea conmoción que en aquel casi im- perceptible instante le cla de pareció que ha sí un absoluto y completo sa- crificio al Señor, para hacer y seguir fielmente su voluntad, con los afectos de humildad, ranza, gozo y agradecimiento, etc. Como sea esto, V. lo entiende aunque yo no le sé decir; digo que expli Anima santísima amor, espe- sólo sl me ocurrió desde lego para carlo aquello de los Cánticos: mea liquefacta' est, ut dilectus locutus est. Alguna otra vez que lo reflexiono,

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