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178 CAPÍTULO XLIX, los Reve i Sevilla el próxuno Mavo B. Diego á Ronda ! (que es ciert le pregunté ya de si d ' ed iría yo allá, y ya de cuá ería mi 1 predicación si para esto me llamasen ma a í bal y quedamos en que fuese luego q 1prOXI las sus Maje tades me avisasen habían Ñ ' > preguntado Ó insinuado algo sobr de Si 1 mí: y en cuanto á la predicación Ó su di pu el sal mañan modo, nada tratamos diante, para Cañ R 553 - « Ahora va el Padre á Grs hall: pal E n nada donde creo permanezea diez 6 arle de es ag! doce dias. Yo me vuelvo á Casar á lo mucho « le debo esperar las resultas de la venida de ca made (2): « Re j sus Majestades. 1 pasar á verlo í e de Y ! 5 d no sólo me es indiferente sino de di ni ver nmapo ¡ gusto, porque deseo con eficacia que ni can te. Justo es D me olviden: pero si me precisa ir y a- son s pun ' tales caso el predicar algun sermon á su y los ven: y tal vez s Majestad es todo mi cuidado: ¿qué erl 'Ordios tendiend ; he de decirle callar en ocasion tan mavor 11 rg or mi ( oportuna me parece ajeno de mi mi- gun aprovechamiento. Est nisterio; hablarles claro, temo si será grande culpa 1 ne ent importuno € imprudencia: y en caso nas, 1 que han puest de hablar claro, ¿qué serán de tant mi espíritu con la esj cosas las que diga ' Este es e punto punta de ) edi n en el grande sobre que sólo su reputaci nl Inv ) Mi qué Vi ni ¡ de V. me ha de servir de regla... os que para mi aprovech, 994. — « No me acuerdo si. dije a m 'oncedido, y q ¡ V. en mi última que había predicado tos, me hallo en mas Í dos sermones en Casares con licencia peo 1ISpo on que ántes del P. Provincial: uno de rogativas seó con nuevas i m para el agua, y otro á los ocho dias el remedio de mi ¡ en acción de gracias; lo que pude pri corresponde ' Inme: dicar sin mucho trabajo, no obstante cios que tengo recibid que fueron sobradamente largos, pues cada uno pasó de dos horas. Con todo me parece que en lo natural se me va encimando el púlpito con el no uso y así lo dije al P. Provincial... Deseo logre V. cumplida salud: yo sigo bien, á Dios gracias, con sólo algun lev toque del flato ardiente. » 0ND. Xi dia 6 de Mayo escribí: el Beato (1): « El inmenso trabajo que V. por Dios se toma, se lo endulce su Majestad con la conversion y salva cion de muchas almas perdidas, como la de ese ajusticiado de quien N me avisa. Quisiera pedir á V. se empe- ñase con Dios para que le concediese en la de mi pobre alma igual satis- facción: pero como no dudo que V. lo hace, me contento con sÓlo propo- nérselo.... » 556. A mediados de Junio, obli gado por su P. Provincial volvió el (1) Carta de Casares, 6 Mayo 1750 de la santidad A 11 Y OdOI ridad que | mi ' ' Inser moverse cor 10, n toda la mi med y sufrirme. d Ñ Ñ mn ud n su novísin por la qu go. No me siona la m dico a V; Ñ que pa " Soti u 1 1 ent! ' ” ' Ñ ' É ta jevupP ve « busar del santo Ministerio, « erdid tras a pal nt y: 10 AIHnIaa | le?