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80 cortesanos en semejante ocasion era contra las leyes de la honestidad, y rehusó obedecer. No podía darse ultraje mayor que este en aque- llas regiones. ¡Una mujer desairar á un marido, y á un monarca, y áun monarca en presencia de su corte, y 4 un hombre encendido con los alcoholes del vino y de los licores! No hubo más que saberlo, para que en el Rey se encendiese un volcan de cólera , y en los gran- des otros de indignacion ; y apénas habló aquél , contestaron éstos segun suponían que el monarca lo queria, y segun convenía tambien á la manera voluptuosa y despótica con que todos trataban á las mu- jeres: fué decretado el repudio de Vasty , quien desde aquel momen- to dejó de ser reina. Concluyóse el convite, vino el sueño , llegó la mañana, y lo que Asuero decretó contra la: reina cuando se hallaba dominado por los efectos de la embriaguez, fué un motivo de pena y escozor para su co- razon; comprendió ya sereno que había cometido con su esposa un acto de injusticia y bárbara arbitrariedad : pero ya no tenía remedio, porque había una ley que hacía irrevocable todo decreto que prónun- ciase una vez el rey de los Persas y Medos. Vasty quedó repu- diada para siempre, y el rey adoptó el consejo de los cortesanos, que le sugirieron el proyecto de reunir todas las doncellas. hermosas del imperio, y traerlas al palacio del Rey , para que escogiese entre las hermosas la 'más hermosa, y quedase sustituida la bella Vasty con otra" que lo fuera más que ella (1). Cupo esta suerte á Ester, cuyo aspecto arrebató el corazon de Ásuero, quien puso sobre sus sienes la corona de reina, y mandó celebrar un gran conyite para darla á conocer á todos sus pueblos; y fué tanta la alegría de su corazon , que quiso mostrarla con actos de beneficencia universal, concediendo alivio en los tributos á todas las provincias , y haciendo presentes y donativos á todos con magnificen> cia de principe. Desde que Ester empezó á vivir en el palacio real, no se apartaba de sus puertas Mardoqueo : y precisamente coincidió con la entrada de aquélla en el regio alcázar la conspiracion de Baga- tan y Tares contra el Rey, la que descubierta por Mardoqueo “fué puesta en conocimiento del mismo rey por Ester á nombre de su tio, siendo ejecutados los reos , pero quedando sin recompensa la fidelidad (1) - San Gerónimo (Epist. ad Paulin.), y con él los Santos Padres , re- conocieron en Ester una hermosísima imágen de la Iglesia, que empezó como un riachuelo y se convirtió despues en un rio caudaloso, siendo amada y querida de su esposo Jesucristo, que desechó á la Sinagoga, figurada en Vasty, que no respiraba el suave olor de la pureza, ni tenía la humildad debida á Dios ; ni suspiraba por más posesión de bienes que los de la tierra. Los mismos Padres han visto en la casta y humilde Ester la figura de aquella Virgen , que por su pureza y humildad enamoró al Rey inmortal de los siglos, y entró en el tálamo del Espíritu Santo.