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394 so, queá su parecer era. esto como el llanto del dolor , y el gemido de pena que aquella morada tenía; porque se iba de ella la que la tenia tan santificada;, la,que ¡era la. santa delos santos y. la más hermosa de las erjatorasi(4). Dispasoslas cosas, de su:babitacion, barrió la.casa , y la aséó;, encendió llas luces neces arias, ordenó: cuanto: ponveala ¡para su entierroy pordia arr egló.la humille¡tariaa,, donde solía, dar al- gun reposo /4 aw preclosisimo.cnerpo , haciendo :todas, estas Dosas por sí sola: pues; la maestra, de la: immildad y de la: pobreza. evangélica no quisó diserepar en-nada, de, lo.qua su Hijo había sido cuando conversó con los horabres. ' ¿Quién podrá: esplicar el gozo que tuvieran estos héroes de lv reli- gion ¿ 'cuando' pudieron ver á:la Madre de aquél.en.cuyo nombre y vir- tud'hablad; derrocado, ya el imperio de la mentira, reprimido la auda- cia del demonio ¿impuesto silencio. 4.sus oráculos fementidos , contua- dido 4. los Sábios carnales, plantado la: religion. y la Cruz en. el palacio de los Ciésares: y dm. el Areúpago de Atenas, y establecido en toJo el mundo/las-sanas costumbres? Pero ¿quién podrá explicar la tristeza que se apoderó de-sus,corazones, cuando comprendieron que Dios los. ha- bia/traido 4mquelingar por medio-de tantos portentos, para que viesen pot da íntima: vez:en la tjerra-á su Santa, Madre, que tanto los amaba? Entraron todos en, elssántocetáculo;, no'pudiendo contener la ¡¡adeci- ble alegría, que se pintaba en sus rostros con sólo ver aquel, cuyas facciones y hermosura tan idénticas á las de Jesús, les recordaban lá presencia de su,Maestro; mucha violencia se hicieron, para no pro- rumpin Ludo, 4 la,xez en na. copioso anto, al saber que en aquel mis- mo día ¿ban 4 quedar- huérfanos de tan santa y tierna Madre,(2). Grande y porténtoso era cuanto habia ocurrido hasta aquel momen- to : pero faltaban las iéinénas sopremás de la, yida de la Virgen; en las cuales se Sentiria la presencia jomediata de la Divinidad ;. y. si.lo que las haprecedido embarga la inteligencia:, sin poder uno haner más que contemplar atónito ,' y admirar las obras de Dios ¿ ¿qué lengua no en- Ñ 01983 (1). Serm,,de Dormit, Delpaz., n,* 1%. : . (e Algunos u po A talos setentay dos discipulos del Salva- dor, sé Féunierón 6h está Ocasiab y y que también se encontró el gr an Dio- nisio Areopagita, el ¿is Hiéroteo, y eladmirable Tinioteo. Y no.de- be causarños admiráción, dice San Isidoro de Tesalónica, pues habiendo mandadoá los nijos €l legislador celestial que den todo honor 4 sus pa- dres, él queria honrar 4 su Madre como codvenia 4 su dignidad, Y puesto que él estaba prestole para, recibir su álma y llevársela al cielo, justo era que él mismo. trajese A .todos los Apóstoles, para que á, manera de los criados y privados delos Feyes. 4 quienes iucumbe disponer, cuanto pertenece ¿los funerales de éstos, hiciesen ellos, que ¿ran ministros *an- tos, lo que convenia en el entierro de la Santísima Señora. (Serm in Vor: mit. Deip., n.* XVI.)