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61 la salvacion de todos los hombres, aunque su numero fuese infinito. Treinta y tres aiios mas tarde morira este Dios de misericordia en una cruz: pero esto no seré mas que la con- sumacion del gran sacrificio, cuya oblacion empezé en el seno de la Virgen y fué completado en la cima del Gélgota. No concluiremos esta materia, verdaderamente encanta- dora para el corazon, sin decir dos palabras mds sobre la inmensa significacion, que tienen las ultimas que dice la Virgen al angel con relacion.4 Dios, con quien en aquel momento la iban 4 ligar los lazos de la maternidad. Mucho era lo que amaba la Virgen Dios, y era entra- fiable el 4nsia con que deseaba que las nubes despidiesen al Justo: deseaba ella verlo y emplearse en su servicio: no po- Ua ocurrirselé 4 ella, que pudiera ser su madre, pues habia consagrado & Dios su virginidad: -pero, sabia por las profe= cias que el Mesias habia de pasar trabajos y persecuciones, y deseaba poderlo aliviar, ayudarle, favorecerle, y ocuparse en ser su mds humilde sierva. Tambien sabia que habia de nacer de una muger, que fuese del pueblo de Dios: y si bien ella no deseaba ser esa muger, por preferir 4 todo la virgi- nidad, con todo, se tenia por la mas dichosa de todas las mu- geres, si le cupiera la suerte de servir 4 esta muger, de ser su esclaya, Rare poder, eo toda entera mes el bien de | yla _ aveee oa cctmabnde tia? gua ian se. abrié como el nardo: el suave aroma del candoroso |y humil- de corazon de la Virgen se esparce, como se difunde el olor _ de la humilde violeta, que, escondida entre plantas inodoras en Ja ladera del monte, abre su capullo en los dias. de pri- mayera y envia & lo lejos sus perfumes. Sométida 4 los de- cretos del cielo, conforme con la eleccion que Dios ha hecho de ella, y fijando sus miradas en su, bajeza, contesta al nun- cio celestial que esté pronta 4 continuar siendo lo que siem- pre ha sido, /a Esclava del Seftor. Angel del Sefior, quiere decir esta Virgen amorosa y hu- ne i ' F 3 {