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98 rar una revolucion saludable en los afectos y deseos del co- razon, dirigiendo las voluntades sin violentarlas, y convi- dando 4 los hombres, no forzindolos; 4 que se levantasen del fango de la corrupcion 4 la contemplacion de lo bello, y sublime de la perfeccion, de lo celestial y beatificador que hay en el amor de Dios. Era preciso que los hombres renun- ciasen 4 muchas cosas que entonces amaban con delirio, cuales eran su propia voluntad, los tesoros, los placeres, las opiniones de la ciencia, y sobre todo, las concepciones inte- lectuales de. cada uno. Para que los hombres volviesen su amor de lo carnal y terreno 4 lo espiritual y celestial, basta~ ba ponerles presente el trato de Jesus y. Maecnn Dicw con- ‘sigo mismo, y con los-hombres,..) © \) ~ll! {Quién no ha de querer ser humilde, cena ve que el Hijo de Dios.se humilla 4 ser siervo de los hombres, y obedece has- ta morir en una cruz, y cuando oye decir:4 su: Madre, sien- do Madre de Dios y Sefiora,del mundo, que s la esclava del Sefior *, y que Dios, ha mirado-4 su bajeza para hacer en ella cosas grandes? * ;Quién.no deseard ser casto, al saber que la, Virgen ha tenunciado.4 la mayor dignidad que hay en los cielos y,en Ja tierra, si no es compatible con la pure- za que h a prometido.al Sefior’ guardar? ® :Quién no hollara las vanidades mundanas, al oir que esa Virgen huye del mundo 4 la edad de tres afios, y se esconde en el templo para no hacer mas gue orar y cantar las alabanzas divinas? {Qué muger habré que nose encierre gustosa entre los mu- ros de su hogar, 4 llenar alli los oficios domésticos con un esposo y.los. hijos que Dios la diere, cuando le consta que la Reina de los Angeles lo ha hecho por espacio de treinta aiios, no omitiendo ninguna de las :faenas y labores de la madre tierna y de la esposa carifiosa? ;Quién no se ofrece en’ holo- causto 4 Dios, cuando sabe que esta Virgen ha: sido un sa-" crificio perenne de oracion y de mortificacion, ofrecido al sér divino desde el primer momento de su existencia? Ademas, jhabré hombre alguno que se niegue 4 dar su vida por de- 4 Lue cap, 1,.v.-88. 2 Idsy. 48: 5 Lue. cap.1, v. 34