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tg Virgen en el templo, porque era esta nifia la casa de Dios, el templo augusto que la sabiduria eterna habia preparado - pava si misma, y el lugar santisimo, donde solo habia de pe- netrar el sumo y eterno sacerdote: y al verla franquear sus sagradas puertas: al_contemplarla tan adornada, no con el oro como el templo material, sino con el fuego del Espiritu Santo, no se puede dejar de ver que hay aqui muchos afca- nos: y en efecto, San Juan Damasceno exclama y dice al examinar esta maravilla: «guarde silencio el sapientisimo Salomon, y no diga que no hay nada. nuevo debajo del sol. Cumplese, afiade el mismo, en este dia lo que Ana ha- bia prometido, cuando determiné consagrar su prole al Se- for: pero todo es misterioso, pues Joaquin y Ana ofrecen con eso un sacrificio 4 la augusta Trinidad. No la ofrecen 4 la edad de dos afios, ni 4 la de cuatro, sino al cumplir tres, manifestando en eso que esa nifia era la esposa y el talamo dela Trinidad invisible. ;O cosa admirable! jEntra el templo animado de Dios en el templo hecho de piedras: una nifia tierna, no solo es templo divino, sino trono serafico.» ' ~ Tba acercandose el dia, en que Ja venerable familia tenia — que cumplir el voto que habia hecho al Sefior, de consagrar- le en el templo el fruto de bendicion que les diese. La santa anciana habia preparado. todas las cosas, para que una oblacion tan pura se hiciese con la solemnidad que le cor- respondia., Describiremos esta ceremonia y cuanto ocurrié en ella con las palabras mismas de San German de Constan- tinopla. «Llena, dice, de santos afectos la venerable ancia- na, acomodando las cosas segun convenia, empieza 4 cami- nar con su esposo amantisimo hacia el templo, llevando en- tre los dos 4 su amada hija, que iba precedida de tiernas virgenes, que la acompaiiaban con luces en sus manos, lle- gando asi al santo templo. Entonces, debiendo entrar en el sagrado recinto la puerta santa que ha de recibir 4 Dios, al Emanuel, dbrense de par en par las puertas de bronce, y él dintel oprimido por los pies de Maria queda santificado. Res ! §. Joann. Damascen., Orat. in Deipar. Nativit. , ¢ as ’ 5 te (este ati Si aea a I a i