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Di Ope ¥ a ee MSI ¢ Leite anit, 51>. 6034 ig ee — 384 (fi goesis it! iS Sh HIST (4s 1" Ea 2 sutisingoy. 20jee HOC ERO ‘y portentos, — Dba. aod Gtiead:4 AGRE OF Elles ark sy tt 5 Ouassdita: Virgen’Maria se dormia east, para is su alma fuese 4 recibir la corona de la gloria ‘eterna, acon- tecia 4 los Apéstolés, lo que sucede 4 quien oye los acentos vibranites de una sinfonia, que con sonidos ‘armoniosos Nena el ambiente por todas partes, y" ‘cnando median algunos ‘compiises de sil ncio, hieren tambien sus oidos los ecos le~ janos de otra armonfa, que no discrepa en su diapason de la que’ tiene’ junto #'si- El asombro es” ‘permanente, el éxtasis ho interrumpido; si calla una sinfonia, habla‘la otra, y él corazon sé encuentra conmovido, y el alma absorta, encan- tada y elevada. Asi sucedid 4 los discipulos ‘al ‘asistir al trdnsito de Ja’ Virgen: las palabras de esta eran para ellos mas suaves que’ el ruido’ armonioso de cien arpas, cuyos acordes unisonosy melodiosos Negan 4 las fibras mas’ deli+ eadas del corazon ‘de quien las oye. En vano intentard él - dolor bus¢ar un ‘resquicio para entrar en los corazones de Jos discipulos} pues no o hallard: si por un instante tan — solo'la “Virgen toma’ aliento para continuar su dulcisimo coloquio; résuenan en sti aposento los ecos'deé las mitsicas angélicas que vienen del cielo y se aceréan; y’ ctlando por fin aquellos labios de carmin se cierran, un conjutito’ de voces 6 instrumenitos del ¢ielo Nena con Shs @¢o8! stiavisi- mos'todo el espacio, y eleva én éxtasis 4 cuantos losoyen. Déscribiremds 10 que'allf pas6 con las needs palabras que ‘To Heficte Saii'Isidoro de Tebalonicn qk siden: orp ober prewoneros caivines SMEAR! ‘eon as fnaldatia’ oe a sus -gidos péreibian. Todo él espacio, que'media entte el cielo y la tierra, estaba ocupado con la brillante muchedumbre' de ‘Jos Santos; los @uales subian'A los ciélos ‘con’ él Sefior que 4 Seérm. de Dorinitionve Deip!, n.° XXL